Llamamos lugares sagrados del cristianismo o ciudades santas a aquellos lugares de peregrinación de los fieles cristianos. En el caso de los tres primeros lugares no hay ninguna duda en el reconocimiento como Ciudades Santas de la Cristiandad a Jerusalén, Roma y Santiago de Compostela, pero no es tan clara la clasificación para los otros 2 santos lugares ya que el cristianismo reconoce muchas ubicaciones donde han acontecido sucesos relevantes: apariciones marianas, obras de Santos o Beatos, hallazgos de reliquias sacras, etc.
1. Jerusalén
Dice el refrán que Jerusalén es ciudad tres veces Santa, pues lo es también para el judaísmo y para el islam, el muro de las lamentaciones y la plaza de las mezquitas y el santo sepulcro son los enclaves más importantes para las tres religiones monoteístas. Es una ciudad de contrastes, un mosaico de culturas que te fascinará. Aquí es donde transcurrieron algunos de los sucesos más importantes en la vida de Jesús, como su última cena o su crucifixión. En el Monte Sion se halla el Cenáculo, el lugar donde Jesús celebró la última cena con sus apóstoles y en el que éstos recibieron al Espíritu Santo en forma de llama sobre sus cabezas el día de Pentecostés.
Probablemente el lugar más sagrado en el mundo para el cristianismo es la Iglesia del Santo Sepulcro en el Barrio Cristiano de la Ciudad Vieja de Jerusalén. En este sitio se produjo la muerte y resurrección de Jesús.
2. Roma
Es el corazón de la cristiandad, S. Pedro es el primer templo de la Iglesia y la catedral del Papa. El Vaticano recibe decenas de millones de peregrinos todos los años. Una cifra que ya ha alcanzado los 30 millones anuales.
Roma, es la ciudad de la fe y, sobre todo, de la historia de una fe que podemos sentir o no sentir, pero que es una parte esencial de lo que somos. Además del vaticano hay lugares imprescindibles: El Coliseo, bellísimo, una maravilla de la ingeniería y la arquitectura romana, pero sobre todo un lugar en el que el peso de la historia y el recuerdo de los mártires casi te aplastan, en el que no puedes dejar de preguntarte cuánta gente ha muerto sobre esas mismas piedras por defender su fe. Y Las Catacumbas, los cementerios subterráneos en los que la fe cristiana se escondió y se multiplicó.
3. Santiago
El origen de Santiago de Compostela está ligado al descubrimiento de los restos del Apóstol, un hecho que supuso que este lugar bañado por los ríos Sar y Sarela se convirtiese en la Edad Media en meta para peregrinos y fieles llegados de toda Europa.
Emblema de la cristiandad europea, la catedral de Santiago de Compostela sigue siendo, desde la Edad Media, polo de atracción de numerosos peregrinos. El Camino de Santiago es un camino de fe y de cultura. Pero sobre todo de fe y uno de los primordiales lugares santos del cristianismo.
5 lugares santos del cristianismo:
Si nos fijáramos en el número de peregrinos anuales para establecer los 5 lugares santos del cristianismo tendríamos que hablar de:
Guadalupe
En 1531, al indio Juan Diego se le aparece Nuestra Señora en el cerro Tepeyac cuando se dirigía a México para oír misa. Guadalupe fue, desde entonces, el faro de luz de toda América. Primero, una modesta ermita en la cima del Tepeyac; desde 1709 la actual gran basílica, que se ha convertido en el templo mariano más visitado del globo con 15 millones de peregrinos anuales.
Aparecida
El pescador Juan Alves faenaba sin éxito en el río Paraiba de Sao Paulo en 1650. Una de las veces que echó las redes, en vez de peces, pescó la cabeza de una Virgen, ennegrecida por haber permanecido tantos años en el fondo del río. Desde que la sacó, los peces comenzaron a llenar sus redes. La imagen, de apenas 36 centímetros, está cubierta por un manto que sólo permite ver su cara y sus manos.
Es tal la cantidad de milagros que se le atribuyen a la Virgen negra que su devoción se populariza. Primero le edifican una ermita y, en 1745, sus devotos le erigen un gran santuario, el de Nuestra Señora Aparecida, construido por los esclavos negros. Pío XII la proclama patrona de Brasil. Una patrona a la que peregrinan sin cesar los brasileños y multitud de ciudadanos de otras partes del mundo. Tiene alrededor de 8 millones de peregrinos.
Padre Pio
Es el único santuario de un beato, recién elevado a los altares, en el ranking de los más visitados, 8 millones de peregrinos anuales. En San Giovanni Rotondo reposan los restos del padre capuchino Pío Pietralcina, el santo de los estigmas de Cristo, de las visiones y de las numerosísimas curaciones.
Pero no pueden faltar en esta relación Santo Toribio de Liébana y Caravaca de la Cruz, otras dos ciudades Santas españolas en las que según la tradición fueron halladas reliquias del madero en el que fue crucificado Jesucristo.
Santo Toribio
Santo Toribio, ciudad que alberga el mayor pedazo de la cruz de Cristo del mundo. Esta reliquia de la cruz, según las crónicas fue recogida por la Madre del emperador Constantino, Santa Elena, en uno de sus viajes a Jerusalén. Es un trozo de madera de ciprés autóctono de la región de Palestina, y según las pruebas del carbono 14 tiene una antigüedad de más de 2.000 años. Actualmente es conservada en la capilla Lignum Crucis del Monasterio de Santo Toribio de Liébana.
Caravaca de la Cruz
En Caravaca la tradición cuenta que el 3 de mayo de 1231 ocurre un hecho que cambiaría la historia de la Ciudad. La villa había sido conquistada y ocupada por las tropas musulmanas; entre los prisioneros cristianos apresados en la contienda se encontraba un sacerdote llamado Ginés Pérez Chirinos. Este religioso sería interrogado por el Sayid o general musulmán Abu-Zeit.Al ser preguntado este por su ocupación, este respondería que se dedicaba a decir misa, acto seguido el almohade le conminó a enseñarle qué era eso de “decir misas”. El sacerdote preparó todo lo necesario para realizarla, pero al momento cayó en la cuenta de que faltaba algo principal en el altar: el crucifijo. En ese momento dos ángeles enviados por Dios entraron en aquel lugar depositando una gran Cruz, en ese mismo instante el Sayid y sus hombres se convirtieron a la fe cristiana. Hoy Caravaca es un gran centro de peregrinación conocido en todo el mundo, gracias sobre todo a Juan Pablo II, que se empeñó en conceder a la Ciudad el título de Ciudad Santa, otorgándole el derecho a celebrar a perpetuidad el Jubileo.
Me gustaría incluir en esta personal relación de lugares santos a Canterbury, la iglesia madre de la Comunión Anglicana. A la hora de nombrar a los creyentes cristianos, a menudo suele haber confusión en cuanto a los términos. Aunque en ocasiones, sobre todo en la jerga coloquial, las palabras católico y cristiano son utilizadas como sinónimos, no lo son: ser católico es en realidad una rama del cristianismo. Un creyente católico también será cristiano, pero un cristiano no tiene que ser necesariamente católico.
Canterbury es una ciudad con una rica historia cristiana. Es el hogar de la Catedral de Canterbury, Su construcción data del siglo VI y ha sido reconstruida y renovada a lo largo de los siglos. La catedral cuenta con numerosas capillas, tumbas y artefactos históricos, como el sitio de la tumba del arzobispo Thomas Becket. Es una de las iglesias cristianas más importantes del mundo y un lugar de peregrinación para cristianos de todo el mundo.
