¿Quieres conocer todo lo que implica la Custodia de la Tierra Santa?, en el siguiente post te indicaremos todo lo relacionado a esta provincia de la Orden franciscana. Ya que se trata de un tema de mucho interés pues está involucrada mucha historia y sucesos de gran importancia hoy día.
Qué es la Custodia de Tierra Santa
La Custodia de Tierra Santa se trata de un custodio de carácter especial, pues es atendido por los frailes menores en Jerusalén, donde se fundó esta como Provincia de Tierra Santa, en el año 1217 bajo la dirección de San Francisco de Asís. Este hecho se hizo formal en el año 1342 cuando dos bulas papales declararon en nombre de la iglesia católica, como oficial de los Santos Lugares.
Tiene como sede el Monasterio de San Salvador del siglo XVI, está ubicado a poca distancia de Nueva Puerta en la Ciudad de Jerusalén. Solo este lugar es el autorizado para entregar la Cruz de peregrino de Jerusalén, a aquellos visitantes que quieran obtener este mérito. Este lugar santo manifiesta su propósito de una buena vida de los cristianos en la Tierra Santa, así como los cristianos del Medio Oriente.
Los últimos dirigentes de la Custodia de Tierra Santa fueron Pierbattista Pizzaballa en el lapso de tiempo del año 2004 hasta el año 2016, y este sucedió a Giovanni Battistelli quien ejerció el cargo por 6 años. El nombramiento de este custodio de Tierra Santa estuvo a cargo del Papa Francisco. Pierbattista nació en Cologno en Italia en el año 1965. Además de esto, recibió el título de sacerdote en el año 1990 y ejerció como custodio principal y luego en el año 2016, lo sucedió el jefe Francisco Patton.
Historia de la Custodia de Tierra Santa
Los franciscanos tuvieron su origen en la Tierra Santa a inicios del año 1217, momento en el que se establecieron en la provincia Siria, bajo el hermano o Frater Elías de Cortona quien era el Ministro. Los frailes se caracterizaban por vivir en un pequeño hogar que estaba ubicado a pocos metros de la quinta estación de la Vía Dolorosa, esto fue para el año 1229. Algunos años después por gracia del sultán Baibars de Egipto este les permitió que los franciscanos se establecieran en el Cenáculo en el Monte Sión.
En el año 1309 lograron posicionarse en Belén y hasta en el Santo Sepulcro, esto en compañía de los Canónigos Regulares. Fue muchos años después, exactamente en 1489, que el Papa Inocencio VIII eliminó la Orden del Santo Sepulcro y dictaminó que se fusionará con los Caballeros Hospitalarios. Esta Orden del Santo Sepulcro luego volvió a ser restaurada en el año 1496, por orden del Papa Alejandro VI, quien determinó que se pasara a un estado independiente, sin embargo, al Custodio se le quitó el cargo de jefe de la Orden.
Este título se nombró como Gran Maestre de la Orden y el cargo estaba bajo la orden del papado, sin embargo, el Custodio continuaba desempeñándose como Patriarca Latino de Jerusalén. Fue en el año 1830 que recibió nuevamente el nombramiento de los dos cargos hasta 1905. Por lo que el cargo de Gran Maestre permaneció en manos del papado hasta 1949.
Objetivo de la Custodia de Tierra Santa
San Francisco y los franciscanos siempre han venerado ardientemente la encarnación de Jesús. Por esto, desde el principio, amaron y aman la Tierra Santa. De hecho, no hay Encarnación si no se concreta en un Lugar. Para los Franciscanos, amar Tierra Santa significa amar a Jesús. Y no podemos pensar en Jesús sin amar su Tierra. Por esta especial veneración de los franciscanos al Evangelio de Jesús y a su encarnación, la Iglesia Católica les encargó la misión de Custodiar los Lugares de nuestra Redención.
Los Santos Lugares no son sólo piedras. Son la manifestación, las huellas, del paso de Dios por este mundo, son las palabras del Señor que ha hablado por medio de los profetas y los apóstoles, y que, en los últimos tiempos, se ha hecho “carne”, hombre como cada uno de nosotros, que habitó en medio de nosotros; son piedras que han escuchado la voz de Jesucristo.
Escuchar la voz que nace de esas piedras, entender su mensaje, ha sido, la labor de la Custodia de los Franciscanos en Tierra Santa.
En resumen: Los franciscanos, viviendo en Tierra Santa, custodian y hacen acogedores los Lugares que son el origen de la fe cristiana y, viviendo en ellos, anuncian el amor de Dios en el lugar donde quiso hacerse hombre para la salvación de todo el mundo.
Propiedades de Custodia de Tierra Santa
Son muchas las propiedades que se le atribuyen a la Tierra Santa bajo la orden franciscana, las cantidades sólo las supera la Iglesia Ortodoxa de Jerusalén. Cuenta con los principales santuarios de la Iglesia del Santo Sepulcro en Jerusalén y la Basílica de la Natividad en Belén, por su parte, los franciscanos son los responsables por ser los propietarios y deben administrarlos con los patriarcados ortodoxos de Jerusalén, así como los ortodoxos armenios.
El custodio de Tierra Santa posee más de 74 santuarios dentro de la Tierra Santa y otras propiedades distribuidas en toda Jordania y Siria. Según indica la historia, solo para el año 1909 en el Patriarcado Latino de Jerusalén, los franciscanos tenían más de 15 parroquias, una gran cantidad de escuelas e incluso unos 25 conventos a la disposición de muchos visitantes.
La Cruz de Tierra Santa
La Cruz de Tierra Santa, es una cruz griega de color rojo sobre fondo blanco rodeada de cuatro cruces más pequeñas, conocida también con el nombre de “Cruz de Jerusalén”, es el símbolo de la Custodia de Tierra Santa.
El significado por el que la Custodia franciscana ha adoptado esta cruz consiste en el recuerdo de la Pasión de Cristo y su dominio universal. Para muchos, de hecho, el número de cruces (cuatro pequeñas más una grande) simboliza las cinco llagas de Jesús sobre la cruz, mientras que la cruz, que siempre ha sido símbolo del cosmos a través del número cuatro que representa los cuatro puntos cardinales y el infinito, significa la presencia cósmica de la potencia de Dios.
