En el año 1858, Lourdes pasó de ser una pequeña y humilde aldea de 4.000 habitantes en el sur de Francia, al lugar donde tuvo lugar una de las apariciones marianas más famosas de la historia a una jovencita enferma: María Bernadette Soubirous. Estas apariciones se sucedieron entre el 11 de febrero y el 16 de julio de 1858. Desde entonces, hace más de 160 años, pocas semanas después de aquellos acontecimientos, Lourdes, aquella pequeña aldea es conocida como la “ciudad de los milagros”.
Una epidemia de cólera asola Lourdes, causando varios muertos y centenares de afectados, entre ellas Bernardette, que sufrirá las consecuencias del cólera y la tuberculosis durante toda su vida.
Primera aparición de la virgen de Lourdes
En 1858, cuando Bernardita tenía 14 años, la Virgen se le apareció en 18 ocasiones. Estos hechos dieron lugar a las primeras peregrinaciones y al posterior levantamiento de una capilla, que finalmente se convertiría en el actual santuario.
La aparición de la Inmaculada Concepción se produjo en la Gruta de Massiabelle . Está formada por tres cavidades desiguales y la más grande se ha convertido en el lugar de celebración de la misa. En la parte superior derecha se encuentra la imagen de la Virgen, dentro de un nicho ojival de dos metros de altura. Es ahí el lugar exacto donde se aparecía la Inmaculada Concepción. La talla se realizó siguiendo las indicaciones de Bernardette. En el suelo, a la izquierda y delante de la Gruta, está señalado por una placa el sitio exacto donde se encontraba Bernardette: «aquí rezaba Bernardette el 11 de febrero de 1858». Al fondo de la Gruta, a la izquierda del altar, se puede ver la fuente que descubrió la joven siguiendo las indicaciones de la Virgen, los peregrinos beben en esta fuente que hizo brotar la Virgen o se bañan en las piscinas que se llenan con esta agua. Al salir de la cueva, las personas tocan la roca y se santiguan, encienden una vela, participan en la procesión de las antorchas…
La Basílica de la Inmaculada Concepción está situada en lo alto de la roca de la Gruta. Fue erigida como basílica menor por el Papa Pío IX el 13 de marzo de 1874. A la derecha de la entrada está grabada en una lápida de mármol con la declaración de la autenticidad de las Apariciones hecha por Monseñor Laurence.
La Basílica de Nuestra Señora del Rosario fue levantada años más tarde. Tiene cabida para unas 1.500 personas. La Santísima Virgen se apareció a Bernardita con el rosario en la mano. De ahí su nombre, que viene dado por los 15 mosaicos que representan las escenas de los misterios del rosario. Fue bendecida e inaugurada el sábado 19 de mayo de 1866 por Monseñor Laurence, obispo de Tarbes, en presencia de Bernardita. Es un lugar de adoración silenciosa y personal. Es el verdadero origen del santuario.
La Basílica de San Pío X está ubicada bajo tierra y está realizada con cemento armado. El motivo de su construcción fue la celebración del centenario de las Apariciones, además de responder a una demanda de los directores de peregrinaciones. Tiene una capacidad para 25.000 personas, siendo la mayor iglesia de Francia
La Iglesia de Santa Bernardita, edificio moderno como respuesta al mundo de hoy, se levanta en el lugar en donde Bernardita tuvo su última aparición. Ese día tuvo que ir al otro lado del río para mantener el encuentro con la Señora y fue aquí donde ocurrió. Se inauguró en 1988, 130 años después de aquel acontecimiento.
La Explanada, es una gran avenida que conduce al santuario, adquiere todo su esplendor a última hora de la tarde, cuando millares de peregrinos realizan la Procesión Mariana de las Antorchas, con velas encendidas.
El Altar de la Pradera, se sitúa entre la ribera del río Gave y la iglesia de Santa Bernardita, es el lugar donde se realizan las celebraciones al aire libre.
La Capilla de la Reconciliación, es frecuentada por personas que buscan la paz y tranquilidad de la conciencia. Allí hay sacerdotes que reciben y atienden a los peregrinos en cada una de las seis lenguas oficiales del santuario: francés, italiano, español, inglés, alemán y neerlandés.
El Santuario de Lourdes está considerado como el segundo lugar católico de peregrinación del mundo, después de Roma. Los peregrinos y visitantes que vienen a Lourdes proceden de todos los continentes. Cada año, más de 6 millones de personas acuden a la Gruta de Massabielle en busca de alivio y esperanza.
Lourdes es uno de esos pocos lugares del planeta en los que parece que el cielo y la tierra se unen de forma especial … La roca de la gruta, el agua de la fuente, la luz de las velas forma parte de un paisaje espiritualmente único que sigue atrayendo a todo aquel que busca encontrar a Dios o simplemente respuestas a los grandes interrogantes de su vida.