Se conoce en la cristiandad como lignum crucis al “leño de la cruz” en el que murió Jesucristo; y, por tanto, a todo fragmento proveniente de la Vera Cruz hallada por Santa Elena entre los años 325 a 327, en el Gólgota de Jerusalén. Se afirma que el descubrimiento sucedió un 3 de mayo y, por ello, la Iglesia Católica celebra y conmemora en ese día “LA INVENCIÓN DE LA CRUZ” (del latín invenio, ‘descubrir’).
La comparación original de la cruz con el árbol de la vida, al parecer se debe a Tertuliano. Esta comparación se establece al considerar a Cristo como «nuevo Adán». De esta manera, la cruz sería la antítesis del árbol de la serpiente del Génesis. Esta imagen se popularizó enormemente desde el siglo XIV.
En el año 347, San Cirilo de Jerusalén, ya hace referencia expresa al madero de la Cruz; y, a partir de esa época, potenciada por el emperador y su madre, la Cruz se hace símbolo universal de la Iglesia, frente al crismón o al buen pastor anteriores.
Santa Elena , descubridora de la Cruz de nuestro Señor, dividió -al menos- en dos trozos el madero de la Cruz, quedando inicialmente uno en Jerusalén y llevándose consigo el otro a la capital imperial. Y todo parece apuntar que en ese madero está el origen de la Vera Cruz de Caravaca.
Fragmentos de la Vera Cruz
Hay narraciones acerca de trozos de la cruz desde fines del siglo IV, cuando se comenzó el reparto de sus fragmentos. Las de las iglesias eran conservadas en cajas llamadas “estaurotecas” que tenían forma de cruz y tenían al centro un vano para colocar la reliquia. Sobre el vano se solía poner una piedra preciosa que impedía el contacto visual con el trozo de madera. Desde el siglo VI las estaurotecas colocan un cristal en vez de la piedra.
Las más famosas estaurotecas son: la de Limbourg (datada en el siglo X), la de la Catedral de Cosenza y de la Catedral de Nápoles (siglo XII). También tiene renombre la de la Catedral de Génova (siglo XIII).
Lignum Crucis Santo Toribio de Liébana
El Monasterio de Santo Toribio de Liébana, Cantabria, España, alberga en su interior multitud de reliquias según cuenta la tradición, traídas por Santo Toribio desde Tierra Santa entre los siglos V y VI. Fue Santo Toribio de Astorga, custodio de las reliquias de Jesucristo en Jerusalén, y ,contando con el permiso del Papa de su época, trasladó un trozo de la Cruz hasta Astorga, ciudad de la que fue Obispo .Sin embargo, la hipótesis más verosímil es que fuese traída al mismo tiempo que los restos de Santo Toribio de Astorga, alrededor del siglo VIII y que dicha reliquia fue traslada a Liébana por cristianos que querían ponerla salvo de los musulmanes que se encontraban ya en puertas del norte de la península en el avance de su invasión. Según el P. Sandoval, cronista de la orden benedictina, esta reliquia corresponde al «brazo izquierdo de la Santa Cruz, que Santa Elena (madre del emperador Constantino, en el siglo IV) dejó en Jerusalén cuando descubrió las cruces de Cristo y los ladrones. Está cerrada y puesta en modo de Cruz, quedando entero el agujero sagrado donde clavaron la mano de Cristo». La madera se encuentra, pues, dentro de un relicario en forma de cruz de plata dorada, con cabos flordelisados, de tradición gótica, realizada en un taller vallisoletano en 1679. Las medidas del leño santo son de 635 mm. el palo vertical y 393 mm. el travesaño, con un grosor de 40 mm., siendo así la reliquia más grande conservada de la cruz de Cristo, por delante de la que se custodia en San Pedro del Vaticano. En el año 1958 el Instituto de las Ciencias Forestales de Madrid realiza un análisis científico, revelando que se trata de madera de ciprés oriental es Cupressus Sempervivens L, de hoja perenne con más de 2000 años de antigüedad. Estos estudios avivaron la devoción y fomentaron que el Monasterio de Santo Toribio de Liébana se convirtiera en un importante lugar de Peregrinación de España.
Lignum Crucis de Caravaca
Es muy célebre, también, el lignum crucis de Caravaca, también llamado, Cruz de Caravaca, que custodiada por la Real e Ilustre Cofradía de la Stma. y Vera Cruz en la Basílica de la Vera Cruz celebra concedido por Juan Pablo II y a perpetuidad cada siete cursos un Año Santo-Jubilar. Se conserva en un relicario con forma de cruz de doble brazo horizontal, (de 7 y 10 cm) y de 17 cm. de alto. Tiene forma y tamaño de un pectoral grande. La Sagrada Reliquia fue foco de peregrinación ya desde el siglo XIV recibiendo hoy millones de fieles siguiendo la Santa Cruz.
Según la tradición perteneció al patriarca Roberto de Jerusalén, primer obispo de la ciudad santa una vez conquistada a los musulmanes durante la primera cruzada (1099). Ciento treinta años más tarde (1229), en la sexta cruzada, durante la estancia en Jerusalén del emperador Federico II, un obispo, sucesor de Roberto en el patriarcado, tenía en posesión de la reliquia. Dos años después la cruz estaba milagrosamente en Caravaca.
Cofradía en España que poseen un Lignum Crucis
En España algunas cofradías poseen un Lignum Crucis que, generalmente, acompaña a sus imágenes titulares durante la Semana Santa. La Real Cofradía del Santísimo Sacramento de Minerva y la Santa Veracruz de León, donada por el obispo Luis Almarcha en 1959, o la Hermandad malagueña del Monte Calvario. En la misma provincia de Málaga, las Hermandades del Cristo de los Vigías de Vélez-Málaga y Nuestro Padre Jesús Nazareno de Alhaurín el Grande han incluido en sus cortejos procesionales nazarenos encargados de portar la reliquia, los cuales van ataviados, como recomienda la liturgia, con su correspondiente paño humeral. En Valladolid, la Cofradía de la Santa Vera-Cruz cierra su Procesión de Regla con la Custodia del Lignum Crucis, labrada en oro y piedras preciosas entre 1500 y 1550.
En Salamanca la cofradía de la Vera Cruz abre la procesión del Resucitado con el paso del Lignum Crucis, un relicario en plata con forma de cruz labrado por Pedro Benítez en 1675 que contiene en la intersección de los brazos una reliquia de la Cruz donada por fray Juan de San Antonio.
En la Semana Santa Soriana, la Cofradía del Santo Entierro de Cristo de Soria, porta a hombros el paso del Lignum Crucis (1968), que porta la reliquia de la Santa Cruz llegada a Soria en 1522, cuando el Papa Adriano VI la requirió para venerarla devolviéndola al año siguiente.
En la semana santa de Andújar, Jaén, la Venerable Hermandad de Nuestra Señora de las Angustias, porta en el paso de costaleros de salida del Viernes Santo un Lignum Crucis dentro de un relicario de plata de Ley que data del siglo XV.
En la provincia de Córdoba, La Hermandad del Calvario de Puente Genil, porta la reliquia el Martes Santo en su estación de penitencia. También La Hermandad de la Veracruz de Aguilar de la Frontera, porta presidiendo su paso de palio en la tarde del Jueves Santo un Lignum Crucis.
En la Semana Santa de Sevilla, la Hermandad de Vera-Cruz (Sevilla) porta un relicario con el lignum crucis que es besado por los fieles durante su estación de penitencia. Aparte otras dos hermandades portan un Lignum Crucis acompañando a las Vírgenes en un pequeño reliquiario. Las cuales son: Hermandad de La Lanzada (Sevilla) y Hermandad de La Estrella (Sevilla)
La Hermandad de los Dolores (El Viso del Alcor) porta un relicario de plata en forma de cruz con el Lignum Crucis que, al igual que el sevillano de la Hermandad de la Vera-Cruz, es besado por los fieles durante su estación de penitencia en Semana Santa. Posteriormente, en la procesión del Corpus Christi, ese mismo relicario procesiona en el segundo de los tres pasos que componen dicha procesión. También en Marchena, la cofradía de la Vera-Cruz porta un relicario similar con el Lignum Crucis durante la procesión de la noche del Jueves Santo.
En la Semana Santa de Murcia, la Cofradía del Santo Sepulcro porta una reliquia del Lignum Crucis junto al Cristo de Santa Clara la Real en un relicario de oro y plata con forma de sol.
Recientemente y tras la finalización de las obras de acondicionamiento de la ‘Capilla de la Vera Cruz’ en la Colegiata de Santa María la Mayor de Caspe (Zaragoza), vuelve a ser expuesta al público la Vera Cruz de Caspe. Esta reliquia (uno de los fragmentos de mayor tamaño en el mundo), sale en la procesión de la Semana Santa, custodiada por la Cofradía de la Vera Cruz.
España, como vemos, atesora una veintena de Lignum Crucis venerados con gran fervor por los cristianos.